martes, 14 de junio de 2005

Spooky, alias PG


Spooky ya no esta con nosotros! El PG de antes - "Pinche Gato" - se habia vuelto en PG: el Pobre Gato. Pero quiero recordarlo como pinche gato. Era un gatazo blanco, de pelo largo, ojos amarillos y un tirano para los demas gatos de la casa. Y la culpa la tenia su madre, una persa gris, de ojos amarillos, quien lo tuvo bajo su mano peluda toda la vida. Cada mañana lo bañaba con la lengua sujetandole por la frente con su mano.

Despues del baño le cortaba meticulosamente los bigotes!!! Se imaginan un gato sin bigotes? El pobrecito tenia miedo de salir del cuarto porque no se podia orientar. Pues de esta manera lo ataba a si la satrapa de su madre! Cuando murio experimento por primera vez lo que es salir al jardin y explorar el ancho mundo! Pero para compañia humana estaba echado a perder. Nunca se acostumbro a los brazos, ni siquiera a las caricias.

Es mas, le chocaba que le pasara la mano por el lomo y se sumia como agua debajo de mis dedos. Pero era hermoso, el mas hermoso de todos. Regio, elegante, altanero, caminaba lentamente por la casa o se echaba al sol. Dicen que los animales blancos huyen del sol. ¡Mentira! tanto mis perros semoyedos - peludos y blancos como la nieve - como el PG les encantaba echarse en la terraza a pleno sol!

Llegaron mas gatos - temine teniendo 11 - pero a el le daba igual, no se metia ni con ellos, ni con los perros ni con los humanos. Vivia una vida solitaria, enigmatica, de hermitaño. Eso si, nunca falto a la hora de la comida y comia con muchas ganas.

Ultimamente empezo a enflacar mucho, y por mas analisis que le hicieron, no encontraron la causa por la cual su cuerpo no aprovechaba ya los nutrientes. Porque seguia comiendo como un naufrago, tres veces al dia - en cambio los otros gatos solo comian dos veces. Y tomaba sus dos platos de leche tambien. Sin embargo lo veia mas debil y mas flaco cada dia. Ayer ya no quiso su higadito picado que tanto le habia gustado, y hoy en la mañana ni la leche quiso. Entonces supe que este era el final. No lo iba a dejar morirse de hambre.

Mi amigo Ricardo lo durmio con una inyeccion que ni sintio entrar. ¡Que durema en paz mi hermoso gato!


3 comentarios:

Letras crocantes revival dijo...

Querer a los animales es una gran cualidad, demasiado lejana para mí, aún así un saludo al buen PG donde quiera que esté :(

Sandralucia dijo...

La vida que llevo el PG, ya la quisieran unos miles de otros "pinches gatos" que andan por ahi, sin nadie que les muerda los bigotes. Suertudo el PG y suertudos nosotros por haberlo tenido.
Un beso

Félix. dijo...

En fin, que tú te lo tomes bien, que por el gato ya no hay qué hacer...