domingo, 25 de noviembre de 2007

La resignación y la esperanza son mis compañeras nocturnas.

Con toda humildad, y desgarradora vergüenza he de confesar que en el momento de mi vida en el que ahora me encuentro. No estoy equipado con las herramientas necesarias para trazar y ejecutar el portentoso plan de escape de mi jaula.

La resignación y la esperanza son mis compañeras nocturnas.

1 comentario:

Estephany dijo...

Yo estoy hoy de manteles largos... hoy mi hijo cumple su primer año de vida...


la resignacion es una basura y doña esperanza... me ha decepcionado muchas veces... no confies en ellas.

Saludos